Inspirada por la visión de la dualidad de la mujer moderna: audaz y sexy, elegante y enigmática, buena y mala. Siempre forzando y traspasando los límites, la misteriosa sensualidad de Good Girl hace que sea una fragancia moderna y sofisticada a la vez.El frasco de Good Girl completa el look de “femme fatale” y desafía las leyes de la atracción terrenal. La compleja dualidad de la feminidad moderna se captura en este sofisticado y polifacético perfume de mujer. Revele su lado bueno (o malo) gracias a la luminosidad del nardo y el jazmín sambac de la mejor calidad, contrastados con las notas peligrosamente adictivas del haba tonka tostada y el cacao